Alta montaña en verano con seguridad. PirineoRealizar actividades de alta montaña en verano con seguridad es responsabilidad de cada uno, de cada una. Si estás empezando en este mundo, aquí te lanzamos algunos consejos, aunque recuerda que lo más importante es que aprendas poco a poco y con el acompañamiento de personas que ya sean conocedoras de este tipo de actividades.

De qué estamos hablando cuando nos referimos a «alta montaña en verano»

La «puerta de entrada» a las actividades deportivas en montaña suele ser el senderismo, entendiendo por senderismo la progresión por el medio natural a pie, siguiendo sendas y caminos, casi siempre señalizados. Pero, como en todos los deportes, si el senderismo nos engancha y salimos a menudo a recorrer caminos y montañas, pronto querremos alcanzar cotas más altas y realizar excursiones más exigentes, tanto a nivel físico como a nivel técnico. Esa progresión natural, que debería hacerse «pasito a pasito», atesorando experiencia y preferiblemente formándonos con clubes de montaña o con guías, antes o después nos llevará a la alta montaña y sus actividades.

Qué caracteriza las actividades de alta montaña

  • Todas las actividades de alta montaña exigen una buena forma física: debemos prepararnos y asegurarnos de que todo el grupo está en condiciones de realizar la actividad.
  • También exigen formación técnica y experiencia en el manejo de cierto material: es fácil que necesitemos piolet, crampones y experiencia en su uso. Una cuerda de seguridad también podrá ser muy recomendable en algunas actividades, siempre que sepas usarla.
  • Incluso en «condiciones de verano», los tresmiles suelen tener nieve en sus rutas normales a principio de verano. Deberemos informarnos sobre si nuestra ruta tiene nieve y, en caso afirmativo, llevar y saber usar crampones y piolet.
  • Caminar por alta montaña exige habilidad y resistencia: sin caminos definidos, por caos de piedras o por pedrizas móviles: bota más que recomendable, y mucha atención a los tobillos cuando el cansancio se hace notar.
  • Orientarse en alta montaña es mucho más complejo que en senderismo, y exige práctica y atención: la alta montaña carece de caminos y de marcas de pintura. Debemos saber guiarnos sólo por hitos de piedra (mojones) que de forma espaciada -incluso a veces por varias rutas simultáneas- indican el recorrido. Llevar y saber leer un mapa es imprescindible. Y muy recomendable llevar el track y el mapa de nuestra ascensión cargado en el GPS del teléfono móvil.
  • Las condiciones meteorológicas en alta montaña pueden llegar a ser extremas y muy cambiantes. Consulta la meteo y lleva abrigo, chubasquero, guantes y gorro para protegerte de posibles condiciones extremas.

Pero vayamos paso por paso

PLANIFICA tu actividad de alta montaña en verano

  • Escoge la actividad adecuada a la experiencia del grupo. Asegúrate de que todo el grupo está preparado física y técnicamente para realizar la actividad son seguridad
  • Calcula el horario previsto con varios horarios parciales, distancias y desniveles que debes superar
  • Consulta la previsión meteorológica, mejor si es una previsión específica de montaña, como la de AEMET montaña
  • Prepara un plan alternativo por si tienes que acortar la actividad. El plan alternativo por defecto es «darse la vuelta»
  • Deja aviso de a dónde vas y el horario en el que tienes previsto regresar

EQUIPA tu mochila para la alta montaña

Perdiguero. Alta montaña en verano con seguridadEs importante que cada miembro del grupo lleve su propio material. Compartir mochila no es una buena elección de cara a la seguridad, porque siempre se deja alguna cosa importante en casa o en el coche, o no  se lleva agua suficiente. Es mejor que si alguien está físicamente menos preparado, cargue con menos cosas (el material común, por ejemplo), pero que todos y todas lleven su propia mochila.

En la mochila para ir a la alta montaña en verano no debería faltar:

  • Calzado adecuado: mejor bota que zapatilla de montaña, ya que la primera protege el tobillo de posibles golpes de piedras, muy probables al caminar fuera de camino
  • Camiseta técnica de manga corta o larga dependiendo de la meteo (1ª capa)
  • Chaqueta caliente (tipo polar, pluma o primaloft) más o menos gruesa dependiendo del tiempo previsto (2ª capa)
  • Chaqueta impermeable-transpirable (3ª capa)
  • Pantalón largo preferiblemente (o un convertible). En caso de prever mal tiempo también uno impermeable
  • Calcetines de montaña (importante que estén diseñados para este uso, nos evitarán ampollas y rozaduras)
  • Gorra o sombrero, gafas de sol y crema de protección solar, para protegernos del sol
  • Un par de guantes y un gorro fino para protegernos del frío (en zonas de alta montaña puede hacer frío incluso en verano)
  • Botiquín con manta térmica
  • Para comunicarnos: teléfono móvil y batería externa para carga adicional. Un teléfono vía satélite o una baliza satelital tipo Garmin In Reach o Spot, pueden ser de gran ayuda en caso de accidente, puesto que en alta montaña hay grandes zonas sin cobertura de telefonía móvil
  • Para orientarnos: mapa, brújula y GPS (también sirve el GPS del teléfono móvil si lo llevas preparado con APP de tipo senderista)
  • Agua (mejor 2 botellas medianas que 1 grande, así en 1 podrás llevar agua normal, y en la otra agua con sales) y comida
  • Linterna frontal (en alta montaña, normalmente se empieza a andar temprano y aún es de noche, o por si acabamos más tarde de lo previsto)
  • Cubremochilas (sobre todo si dan lluvia/tormenta)
  • Papel higiénico y una bolsa pequeña para guardar los papeles sucios y no dejarlos por el monte
  • Bolsas de plástico para llevar el material dentro y por si hacen falta para basura
  • Kit de reparaciones (cinta americana, bridas, algún cordino, navaja multiusos…)
  • Puede ser recomendable llevar un par de bastones, si estás acostumbrada/o a caminar con ellos

Por supuesto, el tamaño de la mochila debe permitir llevar este material, pero normalmente con una mochila de 30-35 litros suele ser suficiente.

Además, si la actividad elegida tiene alguna dificultad técnica extra, a la lista anterior habrá que añadirle el material necesario para garantizar nuestra seguridad:

  • Crampones, piolet y casco si vamos a atravesar zonas con nieve o hielo
  • Arnés, cuerda, casco y elementos de aseguramiento si vamos a realizar pasos aéreos o actividad en cresta

Por supuesto, este material técnico no basta con llevarlo: es imprescindible saber utilizarlo.

ACTÚA con prudencia en la alta montaña

Cuanto mejor se haya planificado la actividad más fácil será cumplir esta premisa, pues nos habremos adelantado a las dificultades. Pero aún así, será necesario mantener la atención sobre la actividad e ir tomando decisiones de manera constante.

  • Madruga: la alta montaña siempre está «lejos». Empieza a caminar al amanecer para asegurarte de que tienes día por delante…Intenta iniciar el descenso no más tarde de las 12 o las 13 h: bajar os puede costar lo mismo que subir si vais demasiado cansados. Recuerda que en tu cálculo de horario debes tener unas 2-3 horas de margen entre el fin de la actividad y el anochecer, por si pasa algo y hay que organizar un rescate.
  • Valora en todo momento cómo se mueve el grupo, y comprueba que lleváis el ritmo esperado. Verifica que esto es así con los horarios parciales que habrás calculado. En caso contrario valora pasar al plan B que has estudiado previamente o daros la vuelta.
  • No dejes nunca a ninguna persona sola ni rezagada. Intenta no dividir al grupo y si por algún motivo debes hacerlo, asegúrate de que los «subgrupos» son plenamente autónomos en la actividad y están en perfectas condiciones físicas.
  • Chequea la evolución de la meteo. Si ves que empeora o que se adelanta la tormenta prevista, es mejor renunciar y volver otro día.
  • Consulta con frecuencia el mapa y el GPS para comprobar que estás siguiendo la ruta prevista y no te has desviado del camino. Ten en cuenta que la alta montaña no suele tener una senda definida, así que si estás siguiendo hitos o mojones no continúes cuando los pierdas de vista: consulta el mapa, el track y regresa sobre tus pasos si crees que has perdido el itinerario.
  • No sobreestiméis vuestras posibilidades. Si la actividad elegida supera en dificultad lo esperado, renuncia. Es mejor prepararse bien y volver otro día, que arriesgarse a sufrir un accidente que puede resultar fatal.

Aspectos a tener en cuenta para la correcta elección de la actividad

La correcta elección de la actividad a realizar es clave. Según los datos registrados por el Servicio de Montaña de la Guarda Civil, la sobre estimación de posibilidades está presente en más de la mitad de los rescates que realizan a personas que están llevando a cabo actividades de alta montaña en verano.

Para escoger una actividad que sea adecuada para el grupo que la va a realizar debemos conocer y valorar correctamente estos dos aspectos sobre el perfil de las personas que componen el grupo: su forma física y la formación técnica/experiencia previa en actividades de alta montaña.

Valora con objetividad la forma física del grupo

Progresar por terreno de alta montañaAntes de escoger la actividad, valora adecuadamente la forma física de cada componente del grupo. Pregúntate:

  • ¿Realizan deporte habitualmente?
  • ¿Qué tipo de deporte? andar por montaña, correr y bicicleta, son los más adecuados para afrontar retos montañeros.
  • ¿Van al gimnasio a tonificar con pesas, hacer yoga o pilates? está bien, y es muy buen complemento, pero si no están acostumbrados/as a realizar ningún tipo de ejercicio de resistencia, no será suficiente para ir a la montaña.
  • ¿Tienen costumbre de llevar mochila «pesada» durante muchas horas? Aunque intentemos optimizar el material a llevar, la mochila necesaria para realizar con seguridad actividades en alta montaña siempre será más pesada que la de las actividades senderistas. Y tendremos que cargarla más tiempo.
  • ¿La persona físicamente menos preparada del grupo podrá disfrutar de la actividad? esa será la persona que determine la marcha de la misma, así que debemos asegurarnos de que hemos realizado una elección adecuada para su perfil en cuanto a la forma física.

Si podemos salir algún día entre semana a hacer algún tipo de deporte de resistencia y el fin de semana hacemos alguna excursión de larga duración, podremos estar preparados para afrontar retos en alta montaña.

Si la actividad a realizar requiere de varias trepadas o escalar, al entrenamiento de resistencia deberemos sumarle algún día de rocódromo o escalada deportiva, para ganar confianza, fuerza y destreza en los pasos complicados.

Tener en cuenta, sobre todo en edades avanzadas, que darte una paliza un fin de semana en la montaña y después estar inactivo hasta la siguiente paliza no es nada bueno para el organismo, sobre todo para el corazón. Hay que ser constante.

Prestar atención a las posibles lesiones o limitaciones de los participantes, si han estado convalecientes recientemente, o necesitan llevar algún tipo de medicación especial.

Conoce de manera previa la formación técnica/experiencia del grupo

Aprender a realizar actividades en alta montaña requiere formación técnica y/o experiencia previa. Por supuesto siempre tiene que haber «una primera vez» en alta montaña, pero esa primera vez (y la segunda, y la tercera…) debería ser en actividades «sencillas» de alta montaña, con el fin de garantizar un aprendizaje progresivo y seguro. Sobre las personas que componen el grupo, pregúntate:

  • ¿Cuánto tiempo llevan haciendo montaña?, ¿y alta montaña?
  • ¿Han hecho recorridos de una dificultad y duración parecida anteriormente?
  • ¿Edad de los y las participantes? Por supuesto que hay casos de niños y niñas que tiene costumbre y motivación desde pequeños a hacer montaña, que pueden asumir grandes retos, pero no es lo habitual. Lo mismo sucede con la gente mayor.
  • ¿Están acostumbrados/as a andar por terreno irregular? zonas inclinadas con hierba, rocas grandes, pedreras, etc. Ganar habilidad para transitar por estas zonas con seguridad requiere tiempo.
  • ¿La persona con menos experiencia del grupo podrá disfrutar de la actividad? esa será la persona que determine la marcha de la misma, así que debemos asegurarnos de que hemos realizado una elección adecuada para su perfil en cuanto a experiencia.

Estudiar la ruta sobre el mapa y descargar o diseñar el track para nuestro aparato GPS

Como en alta montaña normalmente no encontraremos caminos ni carteles indicativos ni muchas señales, sólo algunos hitos que no siempre indican el camino correcto, es imprescindible llevar y saber leer un mapa excursionista, así como muy recomendable llevar un track (trazado) del recorrido para el GPS y el mapa digital para poder superponer ese track con el mapa y con nuestra ubicación.

Recuerda que si tienes un Smartphone, tienes un GPS de montaña, pero para que esta herramienta sea realmente útil debemos descargar una aplicación y saber manejarla.

El mapa excursionista

  • Revisa el track que te descargas, comprueba que coinciden itinerario, distancias y desniveles con lo que habéis mirado sobre el mapa. A veces se cuelgan en la red tracks que no van por el camino adecuado. Montaña Segura tiene un visor de excursiones con los recorridos más habituales del la montaña aragonesa.
  • Calcula horarios totales y varios horarios parciales: Es muy importante desgranar la actividad calculando los tiempos parciales. Conocer cuánto nos debería costar llegar al refugio, lago, collado o punto de paso determinado, nos dará la información necesaria para tomar la decisión de continuar o no una ruta hasta el final previsto.
  • Prepara un plan B más corto y sencillo, y tenlo muy presente durante la actividad. Localiza en el mapa el lugar en el que debas tomar la decisión de optar por ese plan  B.
  • Ten en cuenta el horario de seguridad, muy variable en función de la época del año en que nos encontremos y la hora de partida. Guarda un amplio margen de seguridad ante un posible rescate aéreo (el helicóptero no vuela de noche), o las frecuentes tormentas al medio día.

La importancia de consultar la predicción meteorológica y los avisos de AEMET antes de la salida

Las actividades más exigentes sólo debemos plantearlas en caso de buen tiempo. En caso de mal tiempo previsto (tormentas, lluvia, calor extremo) cancelar o modificar la actividad.

El horario de salida de la excursión también deberá plantearse en base a este parámetro. En días de mucho calor o con riesgo de tormentas de tarde habrá que salir antes para evitar deshidrataciones, golpes de calor o riesgos de caída de rayos e hipotermias.

Recuerda que las tormentas de verano suelen producirse a partir del mediodía, por la tarde o al final del día. Pueden ser muy intensas pero también muy locales, y suelen durar poco tiempo pero provocar grandes daños o problemas (rayos, granizo, aumento de caudales). Además habrá un descenso brusco de la temperatura, que puede ser un riesgo importante sobre la seguridad de las personas sobre todo si no vamos bien equipados y nos hemos mojado.

También puede que anuncien tormentas y no se den (recuerda que las tormentas suelen ser eventos locales). En ese caso debemos actuar preventivamente y planificar en función de la predicción, y si hay que acortar o modificar una actividad lo sensato es hacerlo.

Consejos para progresar por terreno de alta montaña

Caos de piedra en alta montaña. Alta montaña en verano con seguridadLo normal en terreno de alta montaña es progresar por terrenos sin camino ni senda definida: canchales, grandes bloques de piedra, laderas herbosas….

  • Lleva siempre calzado de montaña de calidad, con una buena suela. Mejor bota que zapatilla, para proteger tu tobillo de posibles golpes con piedras que puedan saltar o moverse.
  • Adecúa el ritmo al tipo de terreno. Si vas demasiado rápido hay más posibilidades de accidentarse. Por lo general, da pasos más cortos que si estuvieras en un buen sendero.
  • No subas de puntillas, si es necesario gira el tobillo hacia un lateral para que apoye bien toda la suela del calzado. Ganarás estabilidad, tracción y te cansarás menos.
  • En zonas de mucha pendiente es mejor hacer zetas y evitar la línea recta. Si hay hierba busca los baches o protuberancias para apoyar el pie, ayúdate de los bastones y si el terreno está muy húmedo y hay mucha pendiente, desiste de pasar por ahí. Un resbalón en ese terreno puede provocar una caída peligrosa.
  • En zonas de rocas grandes, intenta no saltar entre ellas (si se mueve la roca de recepción te puedes hacer daño). Busca el camino más llano en el laberinto de rocas. Ayúdate de las manos, en estas zonas los bastones no suelen ser el mejor apoyo. Si algún paso requiere que te sientes, hazlo: es mejor un pantalón manchado que una lesión.
  • En zonas de roca pequeña juega con la gravedad bajando en la línea de máxima pendiente, si se puede. Ayúdate de los bastones para traccionar mejor subiendo.
  • En caso de encontrar piedras pequeñas sueltas sobre terreno duro, extrema las precauciones, ve más despacio y busca más apoyo con los bastones, ya que es el terreno perfecto para perder el equilibrio.
  • Si debes cruzar un cauce, busca zonas de paso con rocas secas y que no tengan una caída peligrosa. Piensa que la mayoría de los apoyos van a resbalar y actúa en consecuencia.
  • En zonas con mucha vegetación, lo mejor es llevar un pantalón largo no muy fino y manga larga, levantar bien los pies y pisar las zonas de pinchos, si las hubiera. Dejar distancia entre los componentes del grupo para no herir con alguna rama a la persona que viene por detrás.

En la mayoría de estos casos, como hemos comentado unos bastones nos serán de gran ayuda y aumentarán la seguridad al andar por terrenos irregulares.

Tener en cuenta que en el Pirineo, a principios de verano, en muchas excursiones de alta montaña nos encontraremos nieve, y en algunas ascensiones, como en el Aneto, Vignemale, etc., habrá nieve o hielo todo el año, por lo que tendremos que llevar crampones piolet y casco y saber usarlo, claro está. Las caídas descontroladas en neveros y zonas de glaciar provocan gran cantidad de accidentes, muchos de ellos graves.

Un último consejo sobre beber y comer en alta montaña

Prepara la comida y la bebida con atención. En días muy calurosos será necesario llevar más agua de la habitual o asegurarse que hay agua potable de camino para poder recargar.

La comida debería ser ligera pero con un buen aporte energético, y por supuesto apetitosa según los gustos personales. No debería faltar nunca alguna barrita o gel de emergencia por si la ruta se alarga más de la cuenta o las fuerzas no acompañan ese día.

Si hay dudas: fórmate en clubes de montaña o de la mano de los y las guías de montaña

Ya veis que para hacer una actividad de alta montaña es necesario tener unos conocimientos y una experiencia previa en media montaña, saber interpretar el medio y estar atentos a una serie de factores ambientales y personales, a veces complicados.

Si no lo tienes claro, o no tienes todavía la experiencia suficiente para transitar por  terreno de alta montaña con seguridad, lo mejor es formarse antes en alguno de los cursos que ofrecen los clubes de montaña o contratar los servicios de un guía de montaña. La montaña no se va a mover de su sitio, pero si no vas con la formación y preparación adecuada puede ser que no tengas nuevas opciones de repetir. Tu seguridad es tu responsabilidad.