Las raquetas de nieve permiten caminar por la nieve con mucha más comodidad que únicamente con las botas. Un paseo por nieve que a pie resulta impensable o agotador, con raquetas es un regalo. Además son baratas, pesan poco y se colocan en cualquier bota…
Con atención y planificación son posibles grandes y pequeñas excursiones de raquetas de nieve con seguridad.
¿De qué vamos a hablar?
¿Salir a pasear con raquetas es también una actividad de montaña?
En pocos minutos un grupo excursionista pasa de estar en una carretera (o en el entorno controlado de una estación de esquí) a situarse en un paraje aislado, con pendientes heladas, riesgo de aludes, condiciones invernales, falta de visibilidad, tiempo cambiante, sin cobertura, sin equipamiento técnico o sin formación específica para su manejo… Y para llegar a esta situación estas personas sólo han invertido algo de fatiga caminando.
Las raquetas han permitido la popularización del excursionismo invernal, pero para garantizar nuestra seguridad debemos conocer y controlar los peligros propios de esta actividad de montaña invernal.
Los recorridos con raquetas de nieve
Podemos diferenciar dos tipos de actividad con las raquetas de nieve:
- El paseo por una zona controlada. La traza está hecha, la pendiente es suave, la orientación nunca es un problema, el riego de aludes no es relevante, se puede interrumpir el paseo en cualquier momento, un cambio de tiempo puede ser molesto pero no peligroso, en caso de percance será fácil pedir ayuda y localizar al accidentado, el agotamiento o la hipotermia no se contemplan… Es el caso de las pistas para raquetas de las estaciones de esquí, de las inmediaciones de un pueblo… En ese caso con una pequeña mochila para guardar ropa de abrigo, un tentempié y el teléfono móvil, puede ser suficiente. Pero ¡ojo de no salirse de este entorno!
- La excursión con raquetas. Es ir a la montaña invernal utilizando las raquetas. Y los riesgos son los mismos que para otras actividades de montaña invernal. En este caso, si queremos hacer excursiones de raquetas de nieve con seguridad es necesario:
- Planificar la actividad de montaña invernal.
- Equiparse adecuadamente. Sonda, detector de víctimas de avalancha -DVA- y pala serán imprescindibles.
- Actuar muy parecido a como se actúa con prudencia en esquí de montaña.
- Tener formación para saber qué hacer si ocurre un accidente.
- Conocer las técnicas de rescate de víctimas en un accidente por alud,
- En condiciones de nieve dura o hielo será necesario llevar y saber usar piolet, crampones y casco.
Cartografía ATES, una herramienta de prevención
El riesgo de aludes es una realidad que también afecta a las actividades con raquetas de nieve: toda actividad en montaña nevada exige conocer y ser capaz de estudiar y valorar la estabilidad del manto nivoso y el tipo de terreno por el que nos movemos. Una gran herramienta es la Clasificación del Terreno de aludes o herramienta ATES, una cartografía que permite evaluar el grado de exposición de nuestro recorrido invernal en función de las variables del terreno y el grado de estabilidad de la nieve.
En Aragón existe cartografía ATES para la zona del macizo del Aneto (refugios de La Renclusa y Cap de Llauset), macizo del Posets (refugios de Ángel Orús, Estós y Viadós), macizo de Monte Perdido – Ordesa (refugios de Góriz y Pineta), macizo de Infiernos (refugios de Respomuso, Ibones de Bachimaña y Casa de Piedra), Bisaurín-Valle Aragon-Cirque d’Aneou-Portalet, y Bielsa (Barrosa, refugio de Pineta, etc..).
Actuando con atención: la correcta gestión del riesgo
Una vez en la actividad, y para adaptar tu toma de decisiones a una actividad segura, debes prestar atención a:
- Elección del recorrido y del trazado: una vez sobre el terreno hay que buscar el trazado que sea más cómodo y seguro para la progresión en raquetas, evaluando pendientes, condiciones de la nieve y riesgo de aludes.
- Adecuación de la experiencia del grupo a la actividad: debemos ser honestos cuando valoremos la experiencia, forma física, habilidades en el manejo del material propio de la montaña invernal, etc…de la totalidad del grupo, y adaptar la actividad al perfil de las personas menos preparadas.
- Atención a la meteorología y sus cambios: aunque antes de salir de casa hayamos consultado la previsión, hay que evaluar si esta se va cumpliendo y que no suponga un riesgo añadido.
Con atención y prudencia, se pueden hace actividades fantásticas y muy seguras con raquetas.