Cómo son las dos rutas

Seguiremos estos pasos:

1. La ascensión tradicional al pico más alto del Pirineo comienza en el aparcamiento de La Besurta (1.900 m) donde se toma el sendero, claramente marcado, que asciende hasta el Refugio de La Renclusa (2.140 m; 50 minutos).
2. Desde esta base montañera, la senda busca los mojones que indican la línea de ascensión bajo la Crencha d´els Portillons. Progresivamente se irá ganado altura entre bloques y pedreras de granito, pasando cerca del Portillón Inferior (2.736 m), que no se cruza, para llegar más adelante al Portillón Superior (2.895 m; 3 h 5 min) por el que pasaremos a la otra vertiente de la montaña.
3. Desde la otra vertiente, se desciende en busca del glaciar del Aneto para remontar en diagonal la ladera hasta la Collada Corones (3.208 m; 4 h 20 min). El caminar por el nevero o el glaciar requiere el uso de material adecuado durante todo el año: piolet, crampones y cuerda.
4. Una vez en la collada, donde confluye la ruta que asciende por Coronas, se atacan los últimos hielos del glaciar y se alcanza la antecima. Antes de alcanzar el objetivo hay que superar un último escollo, el Puente de Mahoma, un arriesgado y estrecho paso entre rocas que exige extremar las precauciones. Tras él se llega a la verdadera cima del Aneto (3.404 m; 5 h)
5. El regreso puede hacerse por el mismo itinerario o descendiendo directamente a buscar la Basa d’el Salterillo y el fondo del valle de Barrancs, que se desciende hasta el Plan d'Aiguallut para regresar, por camino evidente, al aparcamiento de La Besurta (8 h 40 min).

El itinerario a seguir es:

1. Junto al Puen de Corones y el refugio de Les Riberetes (1.955 m) se sale hacia el Este por la pista balizada como GR 11. En cinco minutos se abandona el sendero GR 11 por un camino que se interna en el valle de Corones con dirección Norte. Entre pinar remontaremos la margen izquierda del torrente que desciende de los ibones hasta llegar al Ibonet de Corones (2.230 m; 50 min), un pequeño lago casi colmatado de sedimento. Junto a él hay restos de una construcción y la Cabana de Corones.
2. Bajo la Crencha de Llosás, la senda sube en dirección NE por una ladera pedregosa que rápidamente supera un fuerte desnivel. Aparece en primer lugar el Ibón Baixo de Corones (2.630 m; 2 h), flanqueado al norte por oscuras paredes graníticas. Tras cruzar el torrente junto al aliviadero del ibón, se asciende al NO por una grupa rocosa (mojones) que nos lleva a la cubeta superior, donde están los ibones Altos de Corones o Ibons de Corones. El circo de Corones se alza en toda su magnitud, y bajo el Aneto se alojan los últimos restos del pequeño helero de Corones, el único del macizo orientado al S.
3. Ascendemos a partir de aquí en dirección NE tomando como referencia la gran morrena del glaciar de Corones, donde es recomendable evolucionar por su borde izquierdo. Por canchales o neveros, según la estación, se alcanza la Collada Corones (3.208 m; 3 h 50 min), abierta entre el pico del mismo nombre y el Aneto. Aquí confluye la frecuentada ruta que viene desde el refugio de La Renclusa.
4. Convenientemente equipados (piolet, crampones y cuerda), entraremos en el glaciar bordeando el espolón NO que proyecta la cumbre del Aneto. A partir de este punto hay que subir al SE por fuertes rampas de hielo o nieve hasta la antecima del Aneto.
5. Sólo nos separa de la cumbre el Puente de Mahoma, arista corta, estrecha y aérea, realmente impresionante. Aunque no es difícil, su travesía exige una mínima escalada y paso resuelto. Tras ella, la llegada a la cima del Aneto (3.404 m; 4h 25 min) constituye una verdadera recompensa para cualquier pirineísta sensible.
   
6. El regreso se realizará por el mismo itinerario (7 h 45 min).