Actúa: nadie se queda sólo
Recuerda que como monitor eres responsable del grupo de menores. Por tanto nunca dejes al grupo o a ninguno de los menores solo.
Igualmente, dividir el grupo también puede suponer un problema. Evita dividir el grupo y si lo haces, asegúrate de que las dos partes son completamente autónomas.
Cuidado sobre todo...
En caso de dividir el grupo, es recomendable que siga habiendo un mínimo de 3 personas responsables en cada subgrupo, de tal manera que si uno de los responsables sufriera un accidente, otro de ellos se encargaría de auxiliar a la persona accidentada, mientras el tercero estaría disponible para asistir al resto del grupo. Por ello es fundamental que en cada grupo los y las responsables sean autónomos y autónomas y sepan guiar adecuadamente al grupo.
Existen circunstancias en las que deberemos prestar mucha atención a la unidad del grupo:
- Cuando se reduce la visibilidad por la niebla, la espesura de la vegetación, la lluvia o la escasez de luz.
- En los tramos más comprometidos, donde puedan producirse caídas (desniveles, cursos de agua...).
- Si los componentes están cansados o lleváis ya muchas horas de marcha. En estas situaciones, suelen ser más habituales los despistes y tropiezos.
- Si consideras que no todo el equipo de monitores es suficientemente autónomo como para responsabilizarse con seguridad de una parte del grupo.
- Cuando el grupo está formado por educandos de corta edad.
Toma precauciones
Una de las situaciones que puede generar mayor peligro es la división de un grupo. La mejor recomendación es no dividirlo nunca. Si no podemos evitarlo, tomaremos como precaución básica que en cada subgrupo haya gente capaz de conducir al resto a destino.
Igualmente, debemos evitar dejar sola a una persona (ni menor ni monitor). Retrasarse o quedar a la espera del retorno del grupo comporta también importantes peligros:
- Es muy habitual que la persona se canse de la espera y haga algo no acordado, como regresar sola, sin esperar al grupo.
- Las posibilidades de caer en situaciones de nerviosismo y desorientación se multiplican.
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